
DESPIERTO EN TI...
(serie: "Mis ojos en tus ojos")
- Libre -

Me despierto en tus ojos,
en tus labios vestidos de mañanas,
en cada suspiro abierto de estas ganas
para amarte por todos tus sonrojos,
Me despierto de lumbre
que aún pinta esta noche fugitiva,
un trino atormentado por el alba furtiva
cuando nos danza nuestro instante cumbre.
Me despierto de yugos liberados
en tus manos trenzadas de caricias,
en tus poros terrenos con albricias
que me atrapan de eterno, por tus lados.
Me despierto hecho polvo en tu camino,
un pedazo de día a la intemperie
o quizá de eslabón en una serie
cuando pende sereno algún destino.
Me despierto en tus rizos pintados de tardes,
en tu luz subyugada de alta gracia,
detrás de alguna rosa en verbigracia
cuando mis versos nunca se sienten cobardes...
¿Y sabes? Me despierto siendo tuyo
con tu boca en la mía,
cuando besas mi alegría
con un ¡Te amo...! - de murmullo -



"Y te amo como un campo ama al viento,
te amo con tanto sentimiento
hasta que vuele de mi... el último aliento..."


GRACIAS, AMADA MIA...
(serie: "Mis ojos en tus ojos")
- Soneto Cautivo -

¡Gracias por tu presencia!
Por llegar esta noche destilada
para amarnos oliendo a madrugada,
gracias amada mía por vestirte de esencia
en la fe de un silencio, sacudiendo esta ausencia,
gracias por darte libre y alumbrada
en este instante, sola y de alborada,
donde no hay otra urgencia.
Hay sendas noches entre nuestras bocas,
que ahora son leves sombras corriendo en los rincones,
estos rincones donde me provocas
darte los cristos besos de color corazones.
Gracias amada mía por las pocas
y muchas horas, dándome de tus hermosos dones...
"Y recogemos las mañanas,
despertándonos plenos de más ganas
para seguir, amándonos sin ventanas,
mordiéndonos de entregas soberanas..."




Ella busca en las esquinas de su cama
el amor que no encuentra,
y aunque le azote el viento,
erguida se mantiene.
Es hora de colgar los suspiros
... en las paredes dormidas.
MUJER - Ines Maria Díaz Rengel
Huelva - España

MUJER, SIEMPRE MUJER.
(serie: "Mis ojos en tus ojos")
- Soneto Cautivo -

¡Tú!... Que buscas de amor
las horas jaspeadas por las manos
y buscas ser quien labre estos serranos
sentimientos perdidos, con flamas de un calor...
Tú mujer... la de antes y siempre en el ardor,
quien hoy me ríe y llora haciendo humanos
aquellos mil instantes tan cercanos,
respirando un candor...
Mujer en los aromas de este verso,
en los jazmines quietos con lunas pasajeras,
mujer de cuanto río sin reverso,
aquella de los ojos de ensueños con quimeras,
mujer hecha de olor en tu universo
me vivirás de brisa cuando sola... ¡Me quieras!



